La decoración de Navidad de Vilaóptica consta de un árbol de Navidad rojo, bolsas, espuma y piñas.
Aprovechando el árbol rojo de otros años se han intercambiado sus ramas para crear la figura del gordito, siendo el espumillón plateado el pelo dacha de su chaqueta.
Con la espuma de foam se diseñó su barba; para su cara se utilizó una bolsa de regalo cortada y pintada, dejando el cordón dorado de las asas para sus botas preparadas con bolsas de basura negras y, con otra bolsa de basura negra se cortó el cinturón, donde la hebilla la marcaba el lazo dorado de la bolsa de regalo. ¡Hasta el propio pie del árbol hacía de taburete!
Y para que nuestro querido amigo no le diese la espalda a nadie, se podría decir que era un Papá Nöel con dos caras, una mirando hacia el parque de A Xunqueira, controlando a todos los pequeños que allí se encontraban, y otra hacia los clientes, deseando unas felices fiestas.
Con el resto de espuma se cortaron unas ramas nevadas cubiertas de luces y las letras de su habitual «HO, HO, HO» donde se jugó con la disposición de las mismas para que pudiesen ser visibles desde ambas perspectivas.
En la zona del escaparate se colocaron unos búhos combinados con unos mini sacos rojos y se adaptaron los estantes del expositor con unos metacrilatos para dar un toque más fino y navideño. Las luces amarillas proporcionaban calidez al conjunto.